Leonardo DiCaprio (Los Angeles, 1974) es varias cosas a la vez: uno de los actores más taquilleros de la actualidad, de los más talentosos de su generación, y de los pocos cuyo sola presencia puede elevar el interés de cualquier proyecto.
Varias generaciones lo han visto crecer y evolucionar ante sus ojos y los títulos que lo llevaron a la gloria, Oscar incluido -por fin- son tantos que cada uno puede tener su propio favorito.
Su vida más allá de la pantalla también tiene muchas cosas curiosas, con algunos datos mucho más conocidos que otros pero que vale la pena mencionar:
- Iba a protagonizar El Padrino 4. Y no es un rumor. Francis Ford Coppola y Mario Puzo venían trabajando en el guion y DiCaprio interpretaría la versión joven del fallecido Sonny Corleone (James Caan), pero el proyecto quedó en nada a la muerte de Puzo, autor de toda la saga.
- A los 10 años su agente le recomendó abandonar su apellido italiano y optar por un nombre más comercial como Lenny Williams, pero ni él ni su familia aceptaron la recomendación.
- Es Mensajero de la Paz de las Naciones Unidas. Para nadie es un secreto que desde muy joven ha sido activista en favor del medio ambiente, al punto de fundar en sus veintes la Fundación Leonardo DiCaprio, un hecho que no pasó desapercibido por las Naciones Unidas que luego lo hizo embajador.
- Creció en un barrio muy pobre. Lo que quizá pueda sorprender a muchos, pues su biografía dice nació en Hollywood, Los Angeles. Sin embargo, lo hizo en el lado menos favorecido de la ciudad, al punto que él lo describe como un “gueto de Hollywood”.
- Su victoria en los Oscar en 2016 generó más de 440 mil tuits por minuto. Todo un récord considerando que ni siquiera el famoso selfie de Ellen DeGeneres en la edición 2014 generó semejante cantidad.
- Se peleó contra un tiburón. Esto ocurrió en Sudáfrica en 2006 cuando mientras practicaba buceo, un tiburón blanco le pegó el susto de su vida, debiendo protegerse en una jaula submarina hasta que lo dejó tranquilo.
Hechos bastantes peculiares de una vida que ha sabido de bastantes emociones. A Leonardo DiCaprio le sonríe mucho más que la suerte.