¿Por qué “Un Príncipe en Nueva York” es un clásico de la comedia?
Han pasado más de treinta años desde que se estrenó en cines Un Príncipe en Nueva York, y parece que su legión de seguidores no se limita a quienes tuvieron la chance de verla en aquella época. Es uno de esos extraños casos de cintas que con el paso de los años siguen creciendo y ganando fanáticos.
Pero, ¿cómo se explica que esta comedia de Eddie Murphy haya no solo aguantado el transcurrir del tiempo, sino que además se haya hecho más relevante? Podemos intentar explicarlo con estos motivos:
Cuento de hadas
El príncipe de Zamunda, Akeem (Eddie Murphy) viaja a Nueva York como una de sus últimas actividades antes de casarse. Lejos de querer aprovechar su estatus de realeza, busca una vida de neoyorquino normal, sobre todo cuando se enamora de Lisa (Shari Headley).
Es bastante telenovelero para tratarse de una película de Hollywood, una historia con un protagonista a quien uno como espectador quien que las cosas le salgan bien siempre.
La barbería y Chocolate Sexual
Uno de los grandes atractivos de esta comedia es ver cómo Eddie Murphy y Arsenio Hall no se limitaron solo a interpretar a Akeem y su compañero Semmi, sino que además se dieron tiempo de ser otros personajes.
Los apasionados barberos y sus clientes, el cantante de la banda Chocolate Sexual y el reverendo que los presenta, todos son obra y creación de Murphy, Hall y el equipo de maquillaje que incluso obtuvo una merecida nominación al Oscar.
Éxito inmediato
Un príncipe en Nueva York es uno de esos casos en los que al estrenarse una película las opiniones parecieron dividirse. Para empezar, las críticas fueron mixtas, con algunos medios destacándola por su humor y otros no siendo tan amables.
Pero es sabido que el gran público no siempre concuerda con esas opiniones y su veredicto se hace notar en la taquilla. Por eso se trató de una de las películas más vistas de 1988 superando los $288M a nivel mundial (aplicando la inflación de nuestra época, serían alrededor de $640M).
Eddie Murphy
Para cuando se estrenó Un príncipe en Nueva York, Eddie Murphy ya era una gran estrella de cine, lo que se dice fácil, pero con cada película toca confirmarlo, y este fue el caso.
Su estatus de imán de taquilla se consolidó, pero aun en esas circunstancias conforme pasaban los años no faltaron quienes le hacían saber que esperaban ver una secuela de su más exitosa comedia, algo que, aunque tardó, al fin se decidió a hacer.
Un príncipe en Nueva York 2 no solo se hará realidad sino que además se estrenará en cines este 17 de diciembre con todos los elementos que hicieron de la original un verdadero clásico.
